Crisis hídrica en la provincia: casi 6 millones de hectáreas afectadas por las inundaciones

Las inundaciones que atraviesan distintas regiones de la provincia de Buenos Aires ya comprometen gran parte del sector productivo. Los relevamientos más recientes indican que alrededor de 6 millones de hectáreas presentan algún tipo de afectación, entre áreas totalmente anegadas y campos que hoy no tienen condiciones mínimas para avanzar con las tareas agrícolas.

El impacto se siente con fuerza en distritos del centro y noroeste bonaerense, como Bolívar, Pehuajó, 9 de Julio, Lincoln, Carlos Casares y 25 de Mayo. En varios de esos partidos, la acumulación de agua impide el acceso de la maquinaria y frena el desarrollo de la campaña, lo que podría dejar más de 1,5 millones de hectáreas sin producir en la presente temporada.

Las entidades del agro advierten que este escenario no solo afecta a los establecimientos rurales: también golpea a las economías locales, al transporte, a los proveedores y al entramado comercial que depende de la actividad del campo. La proyección de pérdidas económicas ubica el daño en torno a los 2.000 millones de dólares, una cifra que condiciona la actividad prevista para el año próximo.

En este contexto, volvió a ponerse en el centro de la discusión la necesidad de avanzar con el Plan Maestro del Río Salado, una obra hidráulica diseñada para reducir el impacto de las inundaciones. Uno de los tramos clave permanece detenido por falta de financiamiento, lo que, según el sector, limita la capacidad de respuesta ante episodios que se repiten con mayor frecuencia.

Las entidades plantean que completar las obras permitiría mejorar el escurrimiento del agua y evitar que las lluvias intensas deriven en emergencias como la actual, que afecta tanto a la producción como a la vida cotidiana de numerosas comunidades bonaerenses.