Los gobiernos municipales de Olavarría y Tandil oficializaron la incorporación de dos días extra de asueto en el calendario de fin de año, decisión que complementa las fechas tradicionalmente contempladas para Navidad y Año Nuevo.
En Olavarría, la resolución firmada por el Ejecutivo establece que la administración pública local no atenderá al público el 26 de diciembre y el 2 de enero, manteniendo únicamente las guardias de servicios esenciales. Desde el municipio indicaron que la medida busca facilitar la organización familiar y acompañar el movimiento propio de las celebraciones.
Tandil adoptó una disposición similar, confirmando que las dependencias administrativas también permanecerán sin actividad en esas jornadas. Como es habitual, se garantizará el funcionamiento de áreas críticas como salud, emergencias y seguridad.
Con estas definiciones, ambos distritos se alinean con la tendencia de otros municipios de la región que reorganizan su actividad en torno al receso y al incremento de circulación propio del período festivo.